El derretimiento de los glaciares en la Antártida importa a México porque deriva en el incremento del nivel del mar, con lo que Cancún y Villahermosa podrían estar en el mapa de potencial desaparición, dijo la científica mexicana Sandra Guzmán, quien recién regresó de una expedición internacional en la región Antártica.
Como parte de la iniciativa australiana Homeward Board que busca fortalecer el liderazgo de las mujeres en la ciencia, Sandra Guzmán formó parte de una expedición con 80 mujeres científicas para estudiar los efectos del cambio climático y las acciones que se pueden implementar para enfrentarlo.
Sandra Guzmán explicó a Notimex que su trabajo, que duró aproximadamente 20 días en la expedición en la Península Antártica y donde se han establecido bases de investigación de diferentes países, consistió en documentar los efectos del cambio climático mediante intercambio de diversos materiales de algunos de los científicos establecidos en la región.
Entre los hallazgos, destaca que el derretimiento de hielo en la Península Antártica, ocasionado por el aumento de la temperatura en el planeta, cada vez más acelerado, lo que deriva en enormes porciones de hielo que han desaparecido y que además ya no se recuperan.
Ello, aunado a que la región concentra 80 por ciento de las reservas de agua dulce en el mundo, por lo que el derretimiento de hielos deriva en agua dulce que se mezcla con agua salada del mar, lo que se traduce en pérdidas de las reservas acuíferas del planeta. También hay una reducción sustancial de pingüinos Antelia, que mueren de hambre debido a que se alimentan de crill, un crustáceo cuya pesca en la actualidad se realiza de manera masiva.
Otra de las observaciones que realizó Sandra Guzmán durante la expedición por la Antártida es que la región, que conforma el continente más seco y frio del planeta y donde no llueve, solo nieva, ya se han observado lluvias líquidas. Las personas que viven en las bases de investigación refieren que hay un cambio exponencial y se han observado fenómenos más radicales en los últimos diez años.
A este panorama habría que sumarle los esfuerzos que se han realizado para evitar el incremento del turismo en la región, que hace diez años sumaba unos 15 mil visitantes anuales, y en los últimos años se han llegado a contabilizar hasta 70 mil.
La investigadora destaca la importancia de que México forme parte del Tratado Antártico, del cual forman parte diversos países, para implementar acciones.
“Aunque vamos muy tarde para salvar a muchos de los ecosistemas que ya están en severo peligro, todavía podemos hacer algo para recuperar especies, para recuperar ecosistemas”, agregó Sandra Guzmán, y reafirmó que en el mundo existen muchas mujeres que, como ella, desempeñan acciones importantes para combatir los efectos del cambio climático.